Sabemos que a todo hombre le gusta que le practiquen sexo oral, sabemos que a muchas mujeres les encanta y están dejando atrás los mitos y tabúes, pero no todos somos expertas en tener dentro todo el glande y lograr volverlos locos con nuestra garganta profunda.
Ahora, desde Vibrafacción algunos tips para que seamos la mejor garganta profunda del país (o por lo menos de nuestra pareja).
La posición es la clave. Jamás intentes introducir todo el pene dentro de tu boca si estás parada y con la cabeza hacia abajo. No logrará entrar. Y no podrá entrar por una simple razón: tu garganta, laringe, faringe como quieras llamarle al conducto tiene curvas. Si curvas, es por esto que necesitas estar en una buen posición para que algo recto, duro y juguetón entre por esa boca en su totalidad.
La posición perfecta es estar hincada con la cabeza hacia arriba generando un ángulo de 45 grados entre tu cabeza y su pene. Esto hará que esas curvas de la garganta queden lo más rectas posibles y será mucho más fácil introducir el glande.
Como siempre decimos desde este espacio la lubricación es clave y esta no es la excepción . El pene debe de estar bien lubricado, en este caso como estará mucho tiempo dentro de tu boca utiliza uno de sabor agradable para ti y que sea a base de agua. También debes de mantener tu boca húmeda e hidratada pues aunque no lo creas si no lo está o si realizas una fuerza innecesaria con su pene pasarás un par de días con la garganta adolorida.
Luego de la lubricación podemos pasar a la técnica, aquí es muy importante la utilización de la lengua. ¿Recuerdas esa época en la que ibas al pediatra y te hacia sacar la lengua con una paletilla?, pues es la misma técnica que debes de utilizar para introducir el pene en tu boca y evitar esas ganas de vomitar que dan cuando somos primerizas. La Lengua ayudará a que el pene vaya entrando con cuidado firmeza en tu garganta y a él le encantará pues sentirá la textura de tu lengua junto al calor de tu boca.
No introduzcas todo el pene de una vez. Debes de ir poco a poco, meter la punta, lamer , succionar y sacar. Esto te ayuda a ir preparando tu garganta y a la vez genera expectativa en tu pareja. Ve haciendo lo mismo con el pene hasta que logres introducirlo todo. Trata de mantenerlo ahí todo lo que puedas y sin mucho esfuerzo podrás hacer que él termine.