Y no estamos hablando de haber llegado a los 99 años y que nos alumbre la obviedad más aplastante, la edad. Estamos hablando de la escasa o nula actividad sexual en la plenitud de la vida, osea, cuando se tiene la energía suficiente y la mente saludable, además de una pareja, que eso ya es más que suficiente.
Incluso para todas aquellas personas que no tienen pareja pero disfrutan de juventud o madurez, son más que motivos para aprovechar una de las experiencias más gratificantes que nos da la Naturaleza: la capacidad de vivir una sexualidad activa.
Mucha gente anda a vueltas con la sexualidad, esa asignatura pendiente de todos por algún que otro resquicio e interesa tanto como la política, la economía, el ocio e incluso la gastronomía. Solo que hablar de sexo está catalogado de serie B, es decir, un interés menor. Cosas de la hipocresía y el pudor humanos.
Pero cuando no se tiene sexo, no se tiene bueno o es insuficiente, este caballo de batalla secular se convierte en una preocupación, un desasosiego. Ahora eso sí, no se publica en las redes sociales ni se airea con los compañeros de trabajo o familiares. Se acude a los foros de internet, a las webs donde abundan las preguntas sobre sexualidad, a los sex shops online y a los lugares donde satisfacer cuestiones o encontrar respuestas. En gran parte de las ocasiones, se busca sexo, en las mil formas posibles que se ofrecen fuera de las parejas.
Y mientras se resuelven estas tensiones, las consecuencias de no satisfacer la libido adecuadamente pasan por las siguientes incidencias más o menos acentuadas según sea la persona.
1.- El famoso mal humor de las mujeres luego de llevar un largo tiempo sin tener relaciones íntimas. No es un mito, es real. De ahí tantas expresiones machistas y malsonantes que se oyen en la cultura popular.
2.- Genera stress en la pareja, aunque también puede verse al revés. Pero si teniendo pareja no se hace sexo con frecuencia, esta falta de contacto desemboca en estados de tensión poco propicios para la salud individual y conjunta.
3.- Mayor riesgo de ataque cardiaco, ya que la actividad sexual se relaciona con el mejor ejercicio cardiovascular, tanto en hombres como en mujeres.
4.- Baja autoestima. Tener escasa o nula actividad sexual puede desembocar en una falta importante de auto confianza e incluso en depresión, aunque también puede ser la causa, así que van muy unidos.
Por lo que nuestra recomendación es que disfruten y háganse más fuertes con buenas dosis de sexo. ¡Vívanlo!