La respuesta es rotunda y contundente, sí. La historia del tatuaje se origina en los pobladores de las Islas del Pacífico, incluyendo el Continente Australiano. Pero también los egipcios y la cultura árabe han tatuado en algunas partes del cuerpo símbolos de la naturaleza, sobre todo para embellecerse mejor que con un pedazo de tela, es decir, con ropa.
Si entonces era un signo de belleza corporal y a la vez una forma de expresión, hoy en día ha representado un signo de rebeldía, un claro síntoma de distanciamiento con el sistema y las normas externas de urbanidad con la estética más costumbrista. Con el tatuaje, la piel se convierte en un lienzo que sirve de expresión y comunicación hacia un mundo marcado por las pautas, las costumbres y los prejuicios sociales y de clase. No olvidemos el tatuaje como marca de propiedad para el ganado, con el marcaje a fuego, que es otra forma de tatuar. O los números tatuados de los prisioneros de los campos de concentración nazis o rusos.
Hoy tatuarse es una moda en mayor grado que como signo de rebeldía. Sin embargo, quienes entienden el arte del tatuaje como un vehículo para crear y relacionarse con el mundo que les rodea, lo viven sin ningún tipo de inhibición.
Aunque las modelos de pasarela o de publicidad seleccionan muy bien dónde estampar una imagen, un signo o unas palabras, el resto de los mortales eligen cualquier parte de su cuerpo, incluyendo su cabeza, sus labios de la boca y los otros, para fijar una idea, un pensamiento o, los que no van tan lejos, un dibujo coloreado que les guste. Puro placer, como quien combina prendas a lo largo del día, zapatos o sombreros.
Un hombre tatuado es sexy? Y una mujer tatuada es sexy? Lo es si disfruta de su tatuaje, lo deseó profundamente y lo sigue adorando aún con el paso de los años. Porque muchos tatuados se arrepienten o dejan de sentir eso que sintieron y que les llevó a perpetuárselo en la piel. Otros, necesitan quitárselo porque su tatuaje es luego un estorbo, un mal recuerdo o una tortura, según se mire.
Pero en las escenas íntimas, un cuerpo tatuado de mujer es singularmente erótico, como lo es el de un hombre a pesar de su ‘amor de madre’ que bien puede ser un guiño a la frase de la Legión que muchos soldados de este cuerpo hicieron famosa hace años.
De hecho, para quienes no tienen claro lo que tatuarse pero les sugiere mucho la idea, en el sex shop online se encuentran tatuajes no permanentes tan sexys y atrayentes, que la idea es perfecta para estos casos.